jueves, 31 de julio de 2008

Reprogramar Nuestro Cerebro

Podemos Reprogramar Nuestro Cerebro Para Cambiar El Comportamiento" Entrevista a Joe Dispenza


Hace algo más de veinte años, Joe Dispenza (uno de los maestros de "El Secreto"), fue arrollado por un todo terreno cuando participaba en un triatlón. El diagnóstico de los cuatro cirujanos que consultó coincidía, tenía que operarse inmediatamente, debían implantarle barras de Harrington (de 20 a 30 centímetros desde la base del cuello hasta la base de la columna), ya que la tomografía demostraba que la médula estaba lesionada y que podría quedarse paralizado en cualquier momento.

Dispenza, que era quiropráctico, sabía muy bien lo que eso significaba: una discapacidad permanente y, muy probablemente, con un dolor constante. Su decisión fue arriesgada: intentaría ayudar a su cuerpo a que se recuperara de manera natural, conocía bien todo lo concerniente a huesos y músculos e ideó un plan de acción que incluía auto hipnosis, meditación, una dieta que ayudara a sus huesos a regenerarse y ciertos ejercicios en el agua. Se recuperó totalmente en un tiempo récord y decidió ahondar en el tema.

Durante ocho años, estudió las remisiones espontáneas de enfermedades y le sorprendieron tanto los resultados que decidió volver a la universidad para intentar explicar científicamente lo que había descubierto: el poder de nuestro cerebro como director ejecutivo del cuerpo.

Joe Dispenza estudió Bioquímica en la Universidad Rutgers de New Brunswickle, en Nueva Jersey; obtuvo el doctorado en Quiropráctica en la Life University de Atlanta, donde se licenció magna cum laude y recibió el premio Clinical Proficiency Citation por la extraordinaria calidad de su relación con los pacientes. Miembro de la International Chiropractic Honor Society, ha cursado estudios de postgrado en neurología, neurofisiologí a, función cerebral, biología celular, genética, memorización, química cerebral, envejecimiento y longevidad. Desde 1997 ha dado conferencias ante más de diez mil personas en 17 países de los cinco continentes. A finales de mayo hablará en Madrid y Barcelona coincidiendo con la edición española de su libro Desarrolla tu cerebro.

"Podemos cambiar la mentalidad al crear nuevos cableados en el cerebro y fortalecerlos con nuestro pensamiento"

¿Cómo empezó a interesarse por el cerebro?

He entrevistado a cientos de personas que han sido diagnosticadas con enfermedades -tumores malignos y benignos, enfermedades cardiacas, diabetes, alteraciones respiratorias, hipertensión arterial, colesterol alto, dolores músculo esqueléticos, raras alteraciones genéticas para las que la ciencia médica no tiene solución...-, pero cuyo cuerpo se ha regenerado por sí solo sin la ayuda de una intervención médica convencional, como la cirugía o los fármacos.

¿Milagro?

Observé que una de las causas principales de esas remisiones espontáneas era que habían cambiado su forma de pensar, así que volví a la universidad e hice la carrera de neurociencias para poder explicar qué es lo que ocurría. Cuando afirmo que nuestros pensamientos se convierten literalmente en materia, me baso en la más pura vanguardia científica. Básicamente, esos individuos cambiaron la arquitectura neurológica de su cerebro.

Estimulante curiosidad la suya.

Todas esas personas que tenían una remisión espontánea compartían cuatro cualidades específicas. Lo primero es que todas aceptaron, creyeron y entendieron que había una inteligencia superior dentro de ellos, da igual si la calificaban de divina, espiritual o subconsciente. Lo segundo es que todas aceptaron que fueron sus propios pensamientos y sus propias reacciones las que crearon su enfermedad, y puedo hablar y citar estudios
sobre cualquiera de estos temas durante media hora. Hay un floreciente campo científico llamado psico-neuroinmunolo gía que demuestra la conexión existente entre la mente y el cuerpo.

Le creo, pero avancemos en sus conclusiones.

La tercera característica común es que cada persona decidió reinventarse a sí misma para llegar a ser otro, y los estudios actuales en neurociencias muestran que esto es totalmente posible. Por último, tenían en común que durante el periodo en que intentaban meditar o imaginar en qué querían convertirse, hubo tiempos largos en que perdieron la noción del tiempo y el espacio.

¿Y eso qué significa?

El lóbulo frontal representa un 40% ciento de la totalidad del cerebro, y cuando estamos de verdad concentrados o focalizados, el lóbulo frontal actúa como un control de volumen. Como tiene conexiones con todas las demás partes del cerebro, puedo rebajar el volumen del tiempo y del espacio. En otras palabras, los circuitos que tienen que ver con mover tu cuerpo, sentirlo, percibir lo que hay fuera y percibir el tiempo pasan a un segundo plano, y el pensamiento se convierte en la experiencia en sí, es más real que cualquier otra cosa. De este modo el lóbulo frontal elimina todo lo que no es prioritario para focalizarse en un único pensamiento, y es en ese momento en que el cerebro rehace su cableado.

¿En qué se traduce?

Aquello en lo que pensamos y en lo que concentramos nuestra atención con más frecuencia es lo que nos define a escala neurológica.

Un reciente estudio demuestra que las grandes ideas surgen cuando uno está relajado, pensando en otras cosas.

Entre la intención y el rendirse. Antes se creía que la parte derecha del cerebro es la parte emocional o sentimental, el lado creativo, y la izquierda, la racional o lógica. Pero de hecho, el lado derecho del cerebro es el responsable de procesar la novedad cognitiva, las nuevas ideas que, cuando ya están memorizadas, cuando se convierten en familiares, pasan al lado izquierdo del cerebro. Es lo que conocemos como rutina cognitiva.

¿Cambiar las marchas del coche?

Todas esas cosas que hacemos sin pensar, sí. Esa es la razón de que cuando un neófito escucha música la oiga con el lado derecho del cerebro, pero un músico profesional lo haga con el izquierdo. Esto significa que tenemos la oportunidad de aprender cosas nuevas y recordarlas, es la manera que tiene la evolución de hacer conocido lo desconocido. Podemos cambiar nuestra mentalidad. Al crear nuevos cableados y fortalecerlos con nuestro pensamiento, dándoles prioridad, los que no utilizamos tienden a desaparecer.

Usted habla de inteligencia espiritual, ¿qué es eso, cómo lo explica desde un punto de vista científico?

No hay nada místico en ello. Se trata de la misma inteligencia que organiza y regula todas las funciones corporales. Esta fuerza hace que nuestro corazón lata ininterrumpidamente unas cien mil veces cada día sin que nosotros pensemos siquiera en ello, y se encarga de las sesenta y siete funciones del hígado, aunque la mayoría de la gente ni siquiera sabe que ese órgano realiza tantas tareas. Esta inteligencia sabe cómo mantener el orden entre las células, los tejidos, los órganos y los sistemas corporales, porque ha sido ella quien ha creado el cuerpo a partir de dos células individuales.

¿El poder que da origen al cuerpo es el poder que lo mantiene y lo sana?

El cerebro no puede cambiar el cerebro porque es sólo un órgano, y la mente no puede cambiar el cerebro porque es un producto del cerebro. Así que tiene que existir algo que está operando en el cerebro para que cambie la mentalidad.

¿Cómo define ese algo?

Ja, ja, ja, esa es una pregunta muy filosófica, dos botellas de vino y quizá cuatro horas, porque se trata de la búsqueda del ser. Pero por el momento es curiosamente la ciencia la que nos permite explicar que efectivamente tenemos control sobre nuestra mente y nuestro cerebro, es decir, que no somos un efecto de nuestros procesos biológicos sino una causa. Básicamente, más allá de mis estudios sobre las remisiones espontáneas de enfermedades, lo que intento transmitirle es que nuestros pensamientos provocan reacciones químicas que nos llevan a la adicción de comportamientos y sensaciones y que cuando aprendemos cómo se crean esos malos hábitos, no sólo podemos romperlos, sino también reprogramar y desarrollar nuestro cerebro para que aparezcan en nuestra vida comportamientos nuevos.

¿Y la predestinació n genética?

La investigación científica de vanguardia está mostrando que la genética tiene la misma plasticidad que el cerebro. Los genes son como interruptores, y es el estado químico en que vivimos el que hace que algunos estén encendidos y otros apagados. Se ha realizado un estudio muy interesante en Japón con enfermos dependientes de la insulina tipo dos que mostraba cómo los enfermos sometidos a programas de comedia normalizaban su nivel de azúcar en sangre sin necesidad de insulina. Veinticuatro genes activados sólo por el hecho de reírse. Los genes son igual de plásticos que nuestro tejido neuronal.

¿Cada vez que pensamos fabricamos sustancias químicas?

Así es, y estas sustancias a su vez son señales que nos permiten sentir exactamente cómo estábamos pensando. Así que si tienes un pensamiento de infelicidad, al cabo de unos segundos te sientes infeliz. El problema es que en el momento en que empezamos a sentir de la manera en que pensamos, empezamos a pensar de la manera en que nos sentimos, y eso produce aún más química.

Un círculo vicioso.

Sí, y así se crea lo que llamamos el estado de ser. La repetición de estas señales hace que algunos genes estén activados y otros apagados. Memorizamos este estado como nuestra personalidad, así que la persona dice: "Soy una persona infeliz, negativa, o llena de culpa", pero en realidad lo único que ha hecho es memorizar su continuidad química y definirse como tal. Nuestro organismo se acostumbra al nivel de sustancias químicas que circulan por nuestro torrente sanguíneo, rodean nuestras células o inundan nuestro cerebro. Cualquier perturbación en la composición química constante, regular y confortable de nuestro cuerpo dará como resultado un malestar.

Estamos enganchados a nuestra química interna.

Sí, haremos prácticamente todo lo que esté en nuestra mano, tanto consciente como inconscientemente y a partir de lo que sentimos, para restaurar nuestro equilibrio químico acostumbrado. Es cuando el cuerpo ya manda sobre la mente.

¿Propone cambiar la química cerebral con nuestro pensamiento?

Es una parte de mi trabajo, no se trata sólo de cambiar la química cerebral, también los circuitos cerebrales, el cableado. Si podemos forzar al cerebro a pensar con otros patrones o secuencias, estamos creando una nueva mente. El principio de la neurociencia es que si las células neuronales se activan conjuntamente, se entrelazan creando una conexión más permanente. Una persona ante una situación, por nueva que sea, recurre a esa conexión, es decir, repite el mismo pensamiento una y otra vez y da las mismas respuestas, su cerebro no cambia, vive con la misma mente cada día.

¿Cómo interrumpir el ciclo?

A través del proceso de conocimiento y de la experiencia podemos cambiar el cerebro. Es buena idea examinar constantemente qué podemos cambiar dentro de nosotros. Si cada mañana nos planteáramos cuál es la mejor idea que podemos tener de nosotros mismos, tendríamos otro tipo de mundo.

¿Qué preguntas debemos hacernos para sentir de otra manera?

La mayoría de las personas cree que las emociones son reales. Las emociones y los sentimientos son el producto final, el resultado de nuestras experiencias. Si no hay experiencias nuevas o vividas de otra manera, vivimos siempre en la actualización de sentimientos pasados. Se trata del mismo proceso químico vez tras vez. Una pregunta que ayudaría a cambiarnos es: ¿qué sentimiento tengo cada día que me sirve de excusa para no cambiar? Si las personas empiezan a decirse: yo puedo eliminar la culpa, la vergüenza, las sensaciones de no merecer, de no valer....; si podemos eliminar esos estados emocionales destructivos, empezamos a liberarnos, porque son estos estados emocionales los que nos impulsan a comportarnos como animales con grandes almacenes de recuerdos. ¿Cuál es el mayor ideal de mí mismo? ¿Qué puedo cambiar de mí mismo para ser mejor persona? ¿A quién en la historia admiro y qué quiero emular?

Pero saber quién quieres ser no es suficiente para cambiar tu cableado.

No. El conocimiento es lo que precede a la experiencia. Aprender una información es personalizarla y aplicarla. Debemos modificar nuestro comportamiento para poder tener una nueva experiencia que a su vez crea nuevas emociones. El conocimiento es para la mente; la experiencia, para el cuerpo. Tenemos que enseñar al cuerpo lo que la mente ha entendido intelectualmente. Si seguimos repitiendo esa experiencia, se archiva en un sistema nuevo en el cerebro, y eso permite pasar del pensar al hacer, al ser.

El siguiente paso es cambiar hábitos de comportamiento, tiene que haber acción.

El hábito más grande que tenemos que romper es el de ser nosotros mismos, porque la neurociencia y la psicología dicen que la personalidad ya esta formada antes de los 35 años, eso significa que tenemos los circuitos hechos para poder enfrentarnos a cualquier situación y, por lo tanto, vamos a pensar, a sentir y actuar de la misma manera el resto de nuestros días. Pero los últimos estudios muestran que es posible cambiar la personalidad en todas las etapas de la vida, para eso hay que convertir el hábito inconsciente en algo consciente, llegar a tener conciencia de esos pensamientos y sentimientos inconscientes.

¿Eso son 20 años de psicoanálisis?

Aunque llegues a entender intelectualmente que tu padre era muy dominante, eso no cambia tu condición. El primer paso siempre es aprender. Mientras vamos aprendiendo nueva información y empezamos a pensarla, la contrastamos con nuestras creencias y la analizamos, estamos cambiando nuestro cableado, construyendo una nueva mente. Una vez esa nueva mente está establecida, tenemos que empezar a pensar cómo mostrarla, y ahí entra el cuerpo. Cualquier proceso de cambio requiere el desaprender y el reaprender.



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miércoles, 23 de julio de 2008

BIOMAGNETISMO EN ALEMANIA

Medizinischer Biomagnetismus
nach Dr. med. Isaac Goiz Durán


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Dr.med. Isaac Goiz Durán, geboren 1941 in Puebla / Mexiko, absolvierte 1963 die Ausbildung zum Physiotherapeuten. Viele Jahre arbeitete er am Nationalen Institut für Pneumologie. In dieser Zeit setzte er sich intensiv mit alternativen Behandlungsmethoden wie Akupunktur, Enzymtherapie, Reflexzonenmassage auseinander. Er entwickelte eine Methodik zur schnelleren Rehabilitation von Lungenkranken, die zudem weniger Technik und weniger Medikamente erforderte. Wegen den mangelhaften Bedingungen und ständiger Überlastung des Hospitals war das ein großer Fortschritt. Trotz dieser Erfolge wollte er mehr Entscheidungsfreiheiten und mehr therapeutische Möglichkeiten, die sich nicht nur auf den Bereich der Rehabilitation beschränken. Also studierte er Medizin und promovierte 1984 in Chirurgie und Geburtshilfe.
1988 wurde Dr. med. Isaac Goiz von der „Gesellschaft für Alternativmedizin“ in Guadalajara zum ersten Bioenergetikseminar eingeladen. Dr. Richard Broeringmeyer stellte sein Konzept über biomagnetische Phänomene im menschlichen Körper vor: die bioenergetische Gesundheit, Störungen im Energiefluss, die Bedeutung des pH- Wertes für Zell- und Organfunktionen und die regulierende Wirkung von Magnetfeldern im Rahmen einer Therapie.
Als Dr. med. Isaac Goiz von einem Patienten mit einer als unheilbar geltenden Erkrankung um Hilfe gebeten wurde, verwendete er diese Informationen und suchte nach einer pathologischen pH-Wert Veränderung. Er fand eine saure und alkalische Entgleisung und korrigierte beide durch gleichzeitiges Anlegen zweier Magnete mit gegensätzlicher Polarität. Der Zustand des Patienten besserte sich rasant und blieb auch in den Folgejahren stabil.
Diese Erfahrung und das Konzept von Dr. Richard Broeringmeyer wurden die Basis für seine Theorie „Das biomagnetische Paar“. 1999 verlieh ihm dafür die Internationale Universität Oxford den „Doctor of Philosophy in Bioenergetic Medicine“.

Seit 1998 gibt Dr. med. Isaac Goiz sein Wissen und seine Erfahrungen an Ärzte und Therapeuten weiter. Dr. Gisela Rödl-Linder lud ihn 2002 erstmals nach Deutschland ein. Seitdem findet einmal jährlich in Berlin das Ausbildungsseminar „Medizinischer Biomagnetismus“ statt.

martes, 22 de julio de 2008

Historia de los Imanes

Un poco de historia

Los griegos describieron por primera vez la existencia en occidente de piedras
poderosas o magnetitas. Galeno empleaba magnetos para el tratamiento del dolor. Y
describieron su poder medicinal en ciertas patologías específicas. Pero paralelamente
ya en Oriente, en China principalmente , se usaban para reducir molestias dolorosas y
especialmente la fatiga.

En el siglo IV, Marcel, filósofo y médico francés, aconsejaba llevar un imán alrededor del
cuello para aliviar los dolores de cabeza. En el siglo VI, Alejandro de Tralles utilizaba
imanes para tratar el dolor de las articulaciones.

El médico árabe Ibn Sina, conocido como Avicena (siglo X) trataba a sus pacientes de la
depresión con magnetos.

Y en Persia un médico describió la utilización de imanes en casos de gota y dolores
musculares (año 1000) .

Paracelso, médico del siglo XVI fue uno de los primeros en postular que la Tierra era un
gran imán. En sus obras sobre terapia magnética, Paracelso indica que el "imán es el
rey de todos los secretos" y además describe con detalle los diversos efectos curativos
de esta técnica en los seres vivos.

En el siglo XVIII en Francia fueron célebres los estudios sobre curación magnética
realizados por un abad francés llamado Le Noble : la Real Sociedad francesa de
medicina examinó sus trabajos y elaboró informes tan favorables que concluyeron que
el imán parecía destinado a desempeñar un papel tan importante en la práctica y la
teoría médicas como el que estaba comenzando a tener en el campo de la física
experimental.

Posteriormente, hubo algunos autores que investigaron sobre las terapias magnéticas:

- los japoneses Takahashi y Nakagawa investigaron sobre su beneficio en dolores
articulares;

- J. M. Boboc en 1980 para el tratamiento del dolor de espalda;

- Baron - reputado neurooftalmólogo y director de investigación en el CNRS francés-
que concluyó en 1982 que los imanes eran muy eficaces para tratar el síndrome
mesencefálico (sus experimentos le llevaron a descubrir el aspecto relajante del polo
Norte de un imán);

- P. Orengo, un cirujano ortopédico que trató miles de patologías en las articulaciones
con imanes y que en colaboración con el doctor M. T. Couchard demostró las
propiedades contra el dolor del polo Norte de los imanes;

- Valade ,quien concluyó que eran muy eficaces en el tratamiento de los dolores de
cabeza (la neuralgia de Arnold);

- y los estudios efectuados en el Hospital Saint Michel de París donde un equipo probó
la efectividad de los campos magnéticos en la parálisis facial.
El Dr. Isaac Goiz Durán creador del Biomagnetismo,
exponiendo en el histórico Primer Seminario Nacional:
"Realidad Actual de las Medicinas Complementarias en Chile"
Patrocinado por el Colegio Médico de Chile, 27 y 28 agosto 2004, Santiago, Chile
Dr. Goiz

Dra. Eugenia Yañez

Dra. Katia Velázquez

Dra. Pilar Veiga

Público asistente
Dr. Goiz

Drs.Calderón-Peña-Goiz

Drs.Calderón-Peña-Goiz

Primer Seminario Nacional
Realidad Actual de las Medicinas Complementarias en Chile
Patrocinó Colegio Médico de Chile, 27 y 28 agosto 2004, Santiago, Chile.

A las 9:00 de la mañana del viernes 27 de agosto se inauguró el "Primer Seminario Nacional, Realidad Actual de las Medicinas Complementarias en Chile" organizado por el Departamento de Formación y Acreditación Médica del Colegio Médico de Chile. Unas 200 personas provenientes de los más variados mundos: médicos, farmaceutas, expertos en reiki, en bioenergética, entre otros, se dieron cita en el salón principal del Hotel Neruda para participar de este seminario que se extendió hasta el sábado 28 de Agosto.

El Dr. Isaac Goiz Durán, hizo una impactante presentación, reveladora de la terapia de "El Par Biomagnético" y su efectividad en enfermedades como en VIH SIDA y el Cáncer.
La terapia de Biomagnetismo desarrollada por el Dr. Isaac Goiz Durán de México, involucra descubrimientos tan importantes para el futuro de la medicina que en 1999 la Oxford International University, le otorgó un grado de Doctor en Bioenergética por su sobresaliente trabajo en esta temática.

El Sábado 28, se presentaron los siguientes trabajos:
- Aporte de la Fitoterapia en Atención Primaria, Dra. Katia Velázquez, Hospital Ancud, Chiloé.
- Docencia y Taller de Investigación en Medicinas Complementarias. Dra. Eugenia Yañez, Dra. en Bioquímica en la Universidad de Bonn, Docente en la Facultad de Medicina de la Universidad Diego Portales.
- Experiencia en Alergias y Bioresonancia, Dra. Irene Peña, Concepción.
- Trabajo de Investigación en Acupuntura y Cefaleas; un modelo objetivo en atención primaria. Dra. Marylen Rayo, Dra. Gabriela Montt, Dr. David Calderón T.
- Experiencia práctica hospitalaria en Medicinas Complementarias, Dra. Pilar Veiga, Dpto. Medicina complementaria, Hospital San José.

Dr Isaac Goiz Duran

El célebre Doctor Isaac Goiz Durán ha realizado importantes descubrimientos acerca de lo que hoy conocemos como Biomagnetismo, que es la aplicación del magnetismo a los seres vivos. Este descubrimiento representó para el Dr. Goiz muchos años de paciente investigación en el campo de las terapias energéticas, destacando la importancia de las múltiples vibraciones energéticas para la salud.

Ha escrito varios libros muy importantes, en los que destaca los beneficios del biomagnetismo medicinal.

"El Par Biomagnético" ( 1988) La Oxford International University, la cual le otorgó el grado de "Doctor of Philosophy in Bioenergetica Medicine" el 2 de Septiembre de 1999, pos su tesis.

EL SIDA ES CURABLE (1993) Establece en donde y de que manera se origina el SIDA y cómo el biomagnetismo puede detectar y destruir al virus VIH

EL FENÓMENO TUMORAL(2004) Su más reciente obra, publicada ahora por la Universidad de Loja en nuestro país, quien avala los sorprendentes descubrimientos del Dr. Goiz en relación al origen del cáncer, y la participación de los múltiples agentes patógenos que lo provocan, entre estos:

Parásitos, virus, bacterias, hongos, toxinas y toxóides, entre otros.

jueves, 17 de julio de 2008

Biomagnetismo

Muchas personas se preguntan ¿ qué es el biomagnetismo?, como funciona ?, que puede curar?., se puede utilizar junto a otras terapias?., cuánto tiempo dura el tratamiento?, es muy caro?, me volveré a enfermar de lo mismo?.

A continuación intentaremos dar respuesta a estas interrogantes, incorporando en el futuro las preguntas que lleguen a nuestro correo, para ir completando con la información necesaria que les permita tomar una decisión lo más adecuada , respecto del mejor o más conveniente tratamiento para sus dolencias.

¿ Qué es el biomagnetismo médico? : Consiste en el reconocimiento de puntos de energía alterados en nuestro organismo y que en su conjunto están dando origen a una enfermedad o malestar de curso agudo o crónico. Este reconocimiento se efectúa mediante la utilización de imanes pasivos ( no electrificados ni conectados a máquinas electrónicas), que se aplican en diversas zonas del cuerpo como efectuando un rastreo o escáner biomagnético. Una vez reconocidos y confirmadas las zonas que están alteradas en su potencial energético ( y que corresponden con órganos y tejidos que están sufriendo la distorsión), el terapeuta aplica un conjunto de imanes en esos puntos por un tiempo que fluctúa entre 10 y 15 minutos por cada uno y generalmente se aplican en forma simultánea.

¿ Cómo funciona el biomagnetismo? : Para responder a esta pregunta debemos recordar que todos los seres vivos nos mantenemos en estado de salud cuando existe un equilibrio energético en nuestros sistemas, órganos y tejidos; compuestos finalmente por una delicada y compleja estructura de células que están en constante intercambio de información entre ellas. A su vez las células requieren de un medio ambiente apto para mantenerse en buen funcionamiento y en esto tiene vital importancia el equilibrio iónico en ellas y su entorno. Esto es: de cargas positivas y negativas, dando finalmente un equilibrio entre las cargas ácidas y básicas o equilibrio de pH. El cuerpo humano se mantiene en salud siempre que su pH o acidez interna se mantenga en un rango de neutralidad cercano al valor 7. Ahora bien, cuando hay una noxa actuando, llámese virus, bacteria, tóxico, hongo, trauma, etc., debido a la "mortificación" del tejido afectado, se produce una alteración de su acidez o pH y las células involucradas se ven alteradas en su función, perjudicándose su buen funcionamiento, al tiempo que se va favoreciendo la mantención o la alimentación del " problema" ( bacteria, virus, hongo, parásito, etc). Es decir, la enfermedad o alteración de una parte del cuerpo necesita que se mantenga la distorción o desequilibrio entre cargas positivas o negativas para poder sobrevivir como problema. Si se corrige la alteración iónica, desaparece el problema. ya que se vuelve al punto de equilibrio. De esto último se encarga el biomagnetismo que gracias al efecto de su fuerza o energía de polaridad, la carga o polaridad magnética negativa es capaz de impactar a una carga similar patológica y al hacerla encontrarse con su similar inversa ( la positiva), anularlas hasta hacerlas de valor cero.

¿ Qué puede curar el Biomagnetismo? En teoría puede ejercer un efecto de corrección sobre todas las distorsiones energéticas que se alberguen en un organismo enfermo, cualquiera sea su origen. No obstante la curación absoluta sólo será posible cuando dicha distorción energética no haya causado un daño estructural ( celular) irreversible y cuando la capacidad de reparación no haya sido abolida por efecto del agente causal o la droga aplicada previamente para intentar el control de la enfermedad.

¿ Se puede utilizar junto a otras terapias? El Biomagnetismo es compatible con cualquier otra forma de terapia de tipo energético, es decir pude utilizarse en conjunto con homeopatía, flores de Bach, Reiki, bioenergética, etc. También puede utilizarse en conjunto con tratamientos alopáticos tradicionales siempre y cuando se justifique su uso y no se disponga de otra alternativa. Sin embargo es frecuente que una vez comenzado el tratamiento con Biomagnetismo las dosis de remedios previos sean disminuidas gradualmente, incluso por el médico tratante convencional. Ocurre esto por ejemplo en pacientes diabéticos, insulinodependientes. Una vez que los controles de glicemia indican que ésta va disminuyendo "espontáneamente" es dable esperar que el médico diabetólogo recomiende a su paciente la disminución de insulina de acuerdo a un programa establecido. Lo mismo puede ocurrir con pacientes con inmunodeficiencia, o VIH positivos, cuando después de instaurada la terapia con Biomagnetismo manifiestan una mejora notable en su condición y pueden comenzar a modular las dosis de los fármacos que tomaban antes de la terapia biomagnética. Esto es así en muchas otras enfermedades. Lo importante es que el paciente mantenga un contacto fluido con su médico tratante y en conjunto con él logren establecer el mejor camino para la recuperación de la salud.